En este mundo tan convulso y estresante, los tratamientos de masajes profesionales se han convertido en una alternativa para aliviar dolores en el cuerpo y sentir relajación. El masaje es considerado como una de las herramientas terapéuticas más antiguas que ha utilizado el ser humano para tratar dolencias corporales.
El masaje ha ido evolucionando a través del tiempo, tanto que hoy en día se ha diversificado, por lo que existen muchos tipos de masaje que se adaptan a cualquier necesidad. Ahora bien, es importante considerar, que los masajes deben seguir algunas reglas específicas para evitar lesiones.
Un buen masaje es más efectivo con profesionales
El masaje es un tipo de manipulación de las capas de la piel, en la que se utilizan diversas técnicas que ayudan a mejorar algunas funciones, se utilizan en procesos de curación, relajación de los músculos y para promover la disminución del estrés.
Existen diversos tipos de masajes que van desde el terapéutico, relajante hasta el afectivo sensual. El masaje profesional se utiliza mucho en el ámbito sanitario y deportivo, por lo que necesita de cierta comprensión de anatomía y fisiología.
Igualmente, es necesario conocer sobre indicaciones y contraindicaciones, por lo que estos temas son imprescindibles durante la formación del profesional aspirante a masajista o fisioterapeuta.
El profesional del masaje, debe tener dentro de su formación un componente ético. Por lo que, en su proceder como practicante de la masoterapia, debe tener en cuenta los protocolos establecidos para tratar una lesión o enfermedad, ya que esta actividad está considerada en muchos países como un acto sanitario.
En este sentido, cualquier manipulación corporal que incluya un riesgo de lesión, debe ser supervisada por un médico. Es por ello que el profesional debe estudiar muy bien la historia clínica del paciente y seguir las indicaciones y rutinas establecidas por el doctor.
Tipos de masaje
Como ya mencionamos, el masaje se aplica a través de la manipulación de los tejidos blandos como la piel, el músculo y el tejido conectivo, para promover la circulación, la relajación y la rehabilitación física. Ahora bien, para cada caso se aplica una técnica distinta, por lo que existen diferentes tipos de masajes.
- Masaje deportivo: Este sólo se aplica en los músculos que están comprometidos por alguna lesión o para optimizar su tono, flexibilidad y rendimiento, según la disciplina deportiva específica.
- Masaje circulatorio: Se utiliza para reactivar el flujo sanguíneo y liberar el cuerpo de toxinas.
- Masaje descontracturante: Se utiliza para llevar a la normalidad los músculos que han sido objeto de contracturas por algún esfuerzo físico o por las tensiones diarias.
- Masaje relajante: Tiende a sedar y armonizar el cuerpo a través de la relajación muscular. Se utiliza para lograr el equilibrio entre mente y cuerpo.
- Masaje estético: Es una combinación de técnicas como la circulatoria, modeladora, descontracturante y sedativas para lograr eliminar algunos defectos físicos, eliminar toxinas y modelar el cuerpo en algunas zonas específicas.
Cualquiera que sea el tipo de masaje que quiera llevar a cabo, es importante que reciba un tratamiento de masaje profesional por parte de expertos, ya que esto reducirá cualquier riesgo de lesión que podría lamentar más adelante.